elojeador

Poeamigos

17161

por la mañana eres un árbol frutal
que te das sin recibir ni esperar.
Son aceites sanadores tus caricias
que alivian mi pozo profundísimo.
No quiero querer a nadie más,
no quiero mirar estrellas lejanas. 

Por la tarde eres una higuera
con ramas de amor por llenar.
Me dices: siempre estaré aquí
aunque creas que ya no estoy.
Te pienso continuamente, eres
todas las gotas de mi lluvia fresca. 

Por la noche eres un bello rosal
con rosas rojas y bellas intenciones.
Me das la vida entera y el color de
tu piel y el perfume de tu vientre.
Me das tu cobijo, tu abrazo de oso,
tus ojos, tus besos de enredadera.