12122

llueve desde hace días,
me crece una hormiga amarilla
en la herida de mi pena. 

Cómo te amaba al principio
y cuánto te odié al final y
 ahora amor ¿dónde estás? 

Yo no quería que te marcharas
sin despedirte, taladrándome el alma.
Dejándome esta flor helada. 

Llueve sobre mi piel fría
y triste como tu adiós,
seco mi lágrima oscura. 

Yo ya he perdido las llaves
que abrieron tu cofre secreto,
las extravié en algún cajón. 

Cada historia de amor tiene
su propia andadura, la nuestra
fue triste miserable y vulgar.